José Luis “Chanito” Toledo Medina, quien aprobara las finanzas tanto de Filiberto Martínez como del ex gobernador Roberto Borge, al parecer ya se cansó de estar en eternas vacaciones en Europa y ya quiere regresar a la política, para nuevamente desfalcar el erario.
Es imposible olvidar que “Chanito” Toledo desde joven fue incrustado por su padre en la política y rápidamente llegó a ser tesorero de Solidaridad, en el trienio de Filiberto Martínez, quien endeudó como nunca antes al municipio, para supuestamente realizar una serie de obras que quedaron inconclusas. “Chanito” Toledo fue quien supervisó este robo abierto a los bolsillos de los playenses, quienes hasta la fecha siguen pagando este atraco.
De ahí, José Luis Toledo fue enviado al Congreso del Estado, donde se encargó de la Comisión de Hacienda, además de presidir la Gran Comisión, por lo que se encargó de aprobar las cuentas públicas de Roberto Borge Angulo, el gobernador que más ha robado el la historia de la entidad.
“Chanito” no solo no halló ningún problema con estas cuentas públicas, sino que orgulloso acudía a todo evento con su “jefe” Roberto Borge, incluidas las jornadas del programa “Reciclando Basura por Alimento”, cualquier inauguración de obra, entre muchísimos otros actos públicos.
Para nadie era secreto que Roberto Borge lo estaba preparando para que fuera el próximo gobernador de Quintana Roo, algo que finalmente no ocurrió por presiones a nivel nacional para poner en su lugar a Mauricio Góngora.
“Chanito” no lo sabía en ese momento, pero al no ser el candidato de Borge, se salvó de ser encarcelado. En cuanto dejó el poder, Borge Angulo fue apresado, al salir a flote todos sus actos de corrupción. Poco después, le llegó el turno de ir tras las rejas a Mauricio Góngora, no tanto por las anomalías cometidas como presidente municipal en Solidaridad, sino por consigna, pues como candidato, él se había vuelto en la continuidad de Roberto Borge.
En realidad, debido a acuerdos con el expriista Carlos Joaquín González, muy pocos fueron a la cárcel por el millonario robo cometido por toda una camarilla de cómplices en el poder. Uno de los principales, sin duda, fue “Chanito” Toledo, quien ocultó por años este expolio de las finanzas públicas, y además efectuó persecución política desde el Congreso hacia opositores.
Claro, en cuanto su jefe quedó tras las rejas y dejó de ser conveniente ser priista, “Chanito” renegó de Borge e incluso aseguró que no tenía nada que ver con todos los excesos cometidos, en los que él estaba involucrado de lleno. Fue así que comenzó a dar “tumbos”, primero en el PRD y luego en Movimiento Ciudadano, tratando de mantenerse en algún cargo desde el que pudiera seguir viviendo del erario, antes de desaparecer de pronto, para vivir a lo grande en Europa.
Ahora ha regresado y ya negocia “en lo oscurito” con Lili Campos, una presidenta municipal desesperada por conservar el poder. ¿Qué espera ella conseguir con una figura tan desprestigiada como “Chanito” Toledo?, solo ella lo sabe.